El voley es una de las actividades más elegidas por los miles de chicos que asisten a las colonias de verano de San Isidro en los seis campos municipales de deportes.
“Enseñamos estrategias de defensa y ataque, cómo saltar y sacar, los distintos tipos de movimientos y pases que se pueden hacer con la pelota”, explicó Mario Recalde, profesor en el Campo Nº 5 de Villa Adelina.
El respeto hacia el rival, el compañerismo y los beneficios que obtiene el cuerpo al hacer ejercicio son los pilares de esta actividad. “Nunca incentivamos la competencia. Divertirse es lo que importa”, enfatizó Recalde.
Las clases, divididas por edades, comienzan con una entrada en calor y elongación. Luego se practican las distintas técnicas y se juegan partidos de veinte minutos.
Tras marcar un punto con un remate excelente, Ramiro Salinas, de diez años, comentó que le encanta jugar voley porque, aprovechando su altura tiene facilidades para cruzar la red.
“Me divierto muchísimo en las colonias y hago la mayor cantidad de juegos y deportes que puedo”, dijo Nicolás Conde, de 12 años.
Después de festejar con sus amigas la victoria del partido, Jessica Peña, de nueve años, resaltó, entre risas: “No tenía idea de cómo era este deporte, pero gracias a los profes ahora juego bárbaro”, remató.
