El presidente Mauricio Macri sorprendió a todos al
asistir finalmente al desfile militar conmemorativo de los 200 años de la
Independencia en el Campo Argentino de Polo, después que en la mañana había
anunciado vía Twitter que no concurriría al cierre de los festejos debido al
"cansancio" que le provocaron su reciente gira por Europa y Estados
Unidos y los actos en Jujuy y Tucumán por los 200 años.
"Cansado por la extenuante gira y actos, lamento no
poder asistir a los desfiles de hoy. Espero que se acerquen a Palermo y los
disfruten", tuiteó el Presidente cerca de las 11 de la mañana, un texto
breve que generó inmediatas controversias en las redes sociales.
Sin embargo, a las 14, cuando ya habían comenzado los
desfiles, el Presidente arribó junto con su esposa Juliana Awada y el Jefe de
Gabinete, Marcos Peña, sentándose en el palco principal junto a varios
funcionarios nacionales.
Fue el propio mandatario quien publicó una foto
informando sobre su visita al lugar.
Durante algo más de una hora, el mandatario presenció la
actuación de algunas de los bandas militares de diversos países, nucleados en
el Encuentro Internacional de Bandas de Ejército, que fueron las encargados de
cerrar los festejos por el Bicentenario de la Independencia. Entre ellas se
contaron agrupaciones de Estados Unidos, España, Italia, Bolivia, Chile,
Francia, Marruecos, Paraguay, Perú y Uruguay.
El evento, organizado por el Ministerio de Defensa que
conduce Julio Martínez -quien se sentó al lado del Presidente-, había comenzado
más temprano, con un desfile militar que se realizó en Avenida del Libertador,
entre la calle Jerónimo Salguero y el Campo Argentino de Polo, del que
participaron militares argentinos y de países invitados, seguido por miles de
personas.
El cierre del desfile estuvo a cargo de los ex
combatientes de la Guerra de Malvinas, quienes protagonizaron el momento más
emotivo de la jornada, al recibir ovaciones y aplausos a granel del público
presente, que acompañó la caminata de los ex soldados al grito de
"¡Argentina, Argentina!".
Los ex combatientes desfilaron con sus uniformes,
emocionados ante el clamor popular, algo que posteriormente, en declaraciones a
la prensa, algunos de ellos considerarían como "una deuda saldada" de
reconocimiento por su participación en la guerra de 1982 en el Atlántico sur.
También fue de la partida el ex teniente coronel Aldo
Rico, jefe de comandos durante la Guerra de Malvinas, lo que generó repudios,
pero centralmente en rechazo a su rol durante el gobierno del radical Raúl
Alfonsín, cuando fue uno de los protagonistas de la rebelión carapintada de la
Semana Santa de 1987, cuando ocupó la Escuela de Infantería de Campo de Mayo, y
en enero de 1988, cuando copó un regimiento en Monte Caseros, Corrientes.
Las bandas militares internacionales fueron acompañadas
por un conjunto de agrupaciones argentinas, entre otras las de las fuerzas de
seguridad conformadas por Gendarmería, Prefectura y Policía, las que
interpretaron música variada, aunque se destacaron los tangos ejecutados por
los chilenos (Adiós Nonino, de Astor Piazzolla), y los franceses ("Mi
Buenos Aires querido", del dúo Gardel-Lepera).
Luego de presenciar parte del encuentro de bandas, Macri
se retiró a las 15.20 del predio junto con su mujer; y en el trayecto que tuvo
hasta el helicóptero que lo trasladaría a su descanso fue saludado por cientos
de personas que se encontraban tras las vallas, esperando para verlo.
Una gran presencia de público fue parte de los festejos
en el Campo Argentino de Polo, escena que se repitió en cada uno de los lugares
donde se celebraron los 200 años de la Independencia, desde la vigilia del 9 de
Julio en la localidad jujeña de Humahuaca, el viernes a la noche, a los actos
centrales del sábado en San Miguel de Tucumán.
Macri comenzó su participación en los festejos de los 200
años el 8 en Humahuaca, desde el Monumento de la Independencia, donde pronunció
un discurso en el que enfatizó que "diciéndonos la verdad es que vamos a
salir adelante", junto al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Allí mismo
recibió la fecha patria cantando el himno junto a una gran participación
popular.
El acto central, ya el 9, se realizó en San Miguel de
Tucumán. Asistieron delegaciones internacionales, entre ellos la que encabezó
el rey emérito de España, Juan Carlos de Borbón, y la mayoría de los
gobernadores de las provincias, quienes firmaron un "Acta Acuerdo 200 años
de Independencia", por el cual se comprometieron a que el camino al tercer
centenario sea "el del diálogo, la convivencia, y el del fin de las
injusticias".
Cerca de las 10 de la mañana, el presidente izó la
Bandera en la Plaza Independencia, y posteriormente se trasladó a la Iglesia Catedral,
donde se realizó el tedeum a cargo del arzobispo de Tucumán, Alfredo Zecca.
Luego, se realizó la ceremonia principal en la Casa
Histórica de Tucumán, que finalizó con un discurso de Macri en el que sostuvo:
"No alcanza con que yo les diga la verdad, les tengo que pedir que la
verdad sea algo que gobierne entre todos nosotros, que sea moneda de cambio de
todos los días".
Sobre la avenida Mate de Luna, en el centro de la ciudad,
un desfile cívico militar del que participaron las Fuerzas Armadas,
agrupaciones gauchas, colectividades, instituciones educativas, entre otros,
dio fin a los festejos el 9 de Julio en Tucumán. Que tuvieron réplicas en
varias capitales y ciudades de todos el país, y que se cerraron ayer a la tarde
oficialmente con el show de las bandas militares en Palermo.