El Municipio de San Fernando
está realizando trabajos de desmalezamiento y limpieza en el terreno sito en
Guatemala y vías del ramal a Cardales, para construir -con fondos municipales- un
reservorio para aliviar sustancialmente el problema del agua que baja desde San
Isidro los días de fuertes lluvias. Desde la Comuna estiman que estaría
funcionando en un mes y medio. Este reservorio es necesario ante la falta
de ejecución de obras hidráulicas por parte de la Prov. de Buenos Aires.
Con el objetivo de aliviar anegamientos
en el barrio Villa Jardín, generados por la cantidad de agua que cae los días
de lluvias extraordinarias, el Municipio comenzó a construir un reservorio que mejorará
sustancialmente la situación del barrio -declarado en emergencia por ser una
zona baja que se anega a causa de las obras inconclusas del aliviador Pavón
que, al no poder salir el agua al río Reconquista, se desborda y anega el
barrio y que recibe agua de 16 km. ajenos a San Fernando-. El reservorio, -de 500 m. de largo y 2,5 m. de
profundidad- tendrá una capacidad de 10.000 metros cúbicos.
El Secretario de Obras Públicas, Gastón D´Aquino, explicó:
“Este reservorio es una obra totalmente necesaria que, ante la inacción
provincial tanto en la ayuda como en el mantenimiento de las cuestiones
hidráulicas que le son inherentes, el Municipio toma acción propia y las lleva
adelante. Según lo que hemos estudiado, el barrio Villa Jardín recibe entre 6.000
y 7.000 metros cúbicos de agua cuando caen lluvias extraordinarias y, cuando
desborda, esa agua está en la calle. Para evitarlo, diseñamos este reservorio
que recibirá esos miles de metros cúbicos de agua, e incluso volúmenes mayores”.
“Actualmente, estamos realizando tareas previas de
desmalezamiento y preparación del terreno para tomar las mediciones y comenzar
la obra, que requiere el movimiento de 10 mil metros cúbicos de tierra; cerca
de 1.000 camiones es lo que se va a sacar. Nuestra meta es que el reservorio
esté funcionando en un mes y medio”,
expresó el funcionario.
“Hemos estudiado la posibilidad de derivar el agua de la
calle al zanjón Guatemala, muy angosto y muy chico, que desagua en el zanjón
Fate. Pero como estos zanjones se llenan rápidamente, al desbordarse perjudican
a zonas bajas como este barrio. Cuando por efecto de la gravedad, el zanjón
Fate haya evacuado el agua que recibe de los barrios de Virreyes Oeste, los
barrios del otro lado del zanjón van a poder tener una mejor fluencia de agua. Cuando
haya pasado el episodio climático extraordinario, con el zanjón Fate bajo, el
reservorio de agua de Villa Jardín comenzará a desaguar. Los estudios que
realizamos con ingenieros hidráulicos mostraron que tendrá un buen
funcionamiento, mejorando sustancialmente la situación hidráulica del barrio
Villa Jardín”, explicó con detalle D´ Aquino.
“Cuando el zanjón Fate reciba menos agua desde Villa Jardín,
no va a tener ese caudal en exceso que hace que se desborde y el agua de
Virreyes no pueda salir. Con el reservorio que comenzamos a construir, el agua de
Villa Jardín quedará retenida hasta que el zanjón Fate baje su nivel, y recién
ahí va a desaguar”, culminó.
Cabe destacar que el Municipio lleva
adelante como tema prioritario importantes inversiones con fondos propios en
maquinarias especiales para limpiar y/o desobstruir conductos de desagüe,
trabajos de entubamiento como por ejemplo el que se realiza en el zanjón Charlín,
limpieza de arroyos y cuencas con máquinas municipales y otros como la
ampliación de desagües, para asegurar un rápido escurrimiento de las aguas y
prevenir anegamientos.