El senador nacional aclaró que el joven jujeño asesinado militaba en la UCR, pero explicó que estaba afiliado a la agrupación de Milagro Sala para recibir un subsidio del Gobierno nacional.
El discurso de ayer de Cristina Fernández de Kirchner por cadena nacional dejó varios puntos de análisis, entre ellos, la polémica originada por la muerte de un militante político jujeño, diez días después de haber sido baleado en la víspera de las PASO.
“Les pido a todos los partidos que cesen en este tipo de actitudes que le hacen mal a la democracia. Sólo sacan ventaja los antidemocráticos”, enfatizó la jefa de Estado durante su extensa alocución, y aseguró que el joven Jorge Ariel Velázquez no pertenecía al radicalismo, sino que estaba encolumnado dentro de la agrupación Tupac Amaru conducida por Milagro Sala.
La respuesta a las declaraciones de la mandataria estuvo a cargo del senador nacional y presidente del partido centenario, Ernesto Sanz. “La Presidenta ha faltado a la verdad. Si bien es cierto que figura como afiliado a la Tupac Amaru, también es cierto que esa ficha de afiliación es compulsiva, que le exige esa agrupación a todos aquellos que le dan un beneficio para recibir un subsidio del Gobierno nacional”, contrapuso.
Y aseguró que “el chico era un militante de la UCR, cuando lo mataron militó en el radicalismo y repartió boletas radicales”.
A su vez, recordó que “en los once días que estuvo internado el radicalismo del Jujuy es el que estuvo al lado de él y su familia”.
A pesar de que la fiscal no tiene evidencia de crimen político, el ex precandidato presidencial sostuvo que “la duda está porque cuando lo matan, fueron víctimas de un acto de patoterismo, y el clima de violencia instaurado por esta organización, respaldada por el Gobierno, admite todo tipo de especulaciones”.
