"Enseñándole a Otto a no revolear las cosas. Otto 1, yo 0", comentó con humor al lucir el moretón que le quedó tras sufrir un pequeño corte. Por suerte para Marcela Kloosterboer y Otro, tendrán más tiempo para interiorizar las normas de convivencia.
Como a cualquier familia con nenes chiquititos que lleva casi siete meses encerrada en su casa, a Marcela le pasó que no pudo moderar a tiempo los impulsos del pequeño Otto. Así fue que a través de un posteo en Stories, Kloosterboer compartió cómo le quedó la cara luego de sufrir en carne propia de la rebeldía del niño.
