“Mi vida cambio completamente. Tengo
un futuro firme y un hogar para compartir con mi familia", afirmó Natalia,
una de las familias que forma parte de Suelo
Firme, en la inauguración del barrio ubicado en Derqui, Pilar. Las obras de
urbanización comenzaron en mayo del 2014 y las
primeras 25 familias ya viven en su casa propia. En unos meses se mudará
las próximas 25. Mientras que la
segunda etapa de Suelo Firme prevé el
desarrollo de 48 lotes con servicios.
En los proyectos de autoconstrucción
de viviendas trabaja un equipo técnico
y otro social, que se integran
permanentemente. Las familias de Suelo
Firme fueron parte de un proceso de selección que se realizó con reuniones
masivas en el barrio, y comprometiéndose
a asistir a una reunión semanal, a las jornadas de construcción los domingos y
asumir el pago de una cuota mensual, como forma de afrontar la responsabilidad
y brindar un pequeño aporte al financiamiento de la obra.
Cuando comenzó, el predio donde hoy
se alza un barrio era un descampado. Actualmente, Suelo Firme está urbanizado,
con apertura de calles, provisión y distribución de agua, red
cloacal, planta de tratamiento
modular, y obras hidráulicas. “Es
una bendición que haya gente solidaria. Las puertas de nuestras casas están
abiertas para ustedes”, deslizó Mirtha en la celebración por su casa propia en Suelo Firme.
El proyecto se realiza en el marco
de un plan de urbanización y
organización comunitaria, en un predio de cinco hectáreas en el barrio Monterrey Sur de Derqui. El
objetivo es aportar al crecimiento y desarrollo de la zona, mediante la autoconstrucción de viviendas definitivas,
lotes con servicios, mejoramiento de
viviendas, equipamiento comunitario,
mejora de infraestructura barrial, compra de terrenos y regularización dominial.
El impacto geográfico se deja ver a
través de esta planificación, pero no se trata solo de eso. Alejandro Besuschio, director ejecutivo de Vivienda Digna,
explica: “Nuestro objetivo final es que las familias sean protagonistas de su
propio sueño y que desarrollen sus capacidades, a través de la formación de
comunidades que después se puedan autogestionar”.