El
Director Nacional de Fomento y Desarrollo del Ente Nacional de Comunicaciones
(ENACOM), Martín Kunik, anticipó que ese organismo realizará una “fuerte tarea
de esclarecimiento y concientización” en los municipios de todo el país, para
aclarar la verdadera incidencia de la radiación proveniente de las antenas de
telefonía móvil.
“Ocurre
que en muchas intendencias, la gente se preocupa porque le instalan una antena
de telefonía móvil, y le temen a las radiaciones. Pero hoy, la radiación de una
antena de 4G es menor a la que se produce en un hogar con el uso de un
microondas”, precisó Kunik.
En
declaraciones al programa de tv “Primer Plano”, que se emite por Cablevisión
zona norte, Kunik dijo que “obviamente las intendencias escuchan a los vecinos
y determinan que se saquen las antenas de telefonía móvil: Eso hace que, por un
lado, cada vez haya menos antenas y la calidad del servicio se deteriore y, a
la vez, y peor aún, las antenas que quedan deben irradiar más”.
“Esto
quiere decir que más antenas irradian cada vez menos, porque hace falta menos
potencia por antena. A menos antenas, mayor irradiación”, para alcanzar el
contacto entre antenas y hacia los teléfonos, precisó el funcionario nacional.
Kunik
dijo en tal sentido que se está tratando “de realizar una tarea de
concientización en los municipios grandes del conurbano, y en los municipios
chicos del interior del país”, concluyó.
¿Cómo
funciona la telefonía móvil?
Para
que la comunicación entre dos dispositivos móviles sea posible, es necesario
que exista una infraestructura que realice las conexiones. Se compone de
estaciones base y nodos de conmutación
unidos por vínculos, construidos mediante radioenlaces o fibra óptica. Esta
infraestructura debe ser desplegada en
el área en la que se deba dar cobertura.
El
sistema se completa con los dispositivos móviles (celulares, tablets,
notebooks, etc.) que se comunican entre sí mediante la transmisión de ondas de
radio. Esa transmisión inalámbrica se realiza gracias a las ondas electromagnéticas originadas y
recibidas por las antenas.
La
transmisión de energía en forma de ondas electromagnéticas a través del aire se
denomina radiación o emisión. Las emisiones electromagnéticas tienen dos tipos
de frecuencia: Emisiones ionizantes (de alta frecuencia, como los rayos x) y
Emisiones No ionizantes (de baja frecuencia, como las empleadas por el sistema
de telefonía móvil).
Las
radiaciones no ionizantes (RNI) carecen de energía suficiente para afectar la
estructura de los organismos. La potencia promedio transmitida desde una antena
es de aproximadamente 100 watts, el equivalente a una bombita eléctrica, menor
a la de un televisor y la mitad que la de un lavarropas.
Mediciones
El
ente regulatorio establece cómo deben medirse las radiaciones para controlar
que se respeten esos límites. Todas las mediciones realizadas en Argentina han
dado como resultado que las antenas de telefonía celular emiten RNI centenares
de veces por debajo de los valores establecidos, cumpliendo rigurosamente con
la normativa vigente, y los límites de exposición establecidos por la
Organización Mundial de la Salud.
Las
ondas utilizadas por la telefonía móvil en todo el mundo, están en las
frecuencias entre los 700 y 2100 MHz. En la Argentina las frecuencias
utilizadas son próximas a los 850 MHz y los 1900 MHZ. Los especialistas
concluyen que el uso del teléfono móvil y la radiofrecuencia emitida por las
antenas no tienen efectos perjudiciales para la salud.
Según
Miguel Galano, Gerente de Relaciones Externas y Regulación de Telefónica de
Argentina, “Movistar mide regularmente sus antenas en todo el país,
garantizando a la población el cumplimiento estricto de los estándares y
seguridad y calidad, de acuerdo a lo establecido por la resolución N° 202
MSyAS/1195 del Ministerio de Salud, que determina los valores máximos que deben
cumplir todos los sistemas que hagan uso del espectro radioeléctrico”.
Añadió
que paralelamente, estas estaciones
cumplen los criterios de la Comisión Internacional de Protección contra las
radiaciones no ionizantes, que es un organismo asesor de la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
Galano
dijo que recientemente se realizaron mediciones en las ciudades de Esquel,
Mendoza, Villa La Angostura y Bariloche, junto a personal de ENACOM y
autoridades municipales.
“Estos
controles permitieron comprobar que las radiaciones que emite una antena están
de 100 a 1.000 veces por debajo del límite máximo permitido. Si comparamos con
otras fuentes generadores de Radiaciones No Ionizantes (TV abierta, TDT, FMs,
etc.) podemos deducir que los niveles originados en los sistemas de telefonía
móvil están muy por debajo de dicha fuentes”, aseguró el directivo de
Telefónica.
Las
mediciones, según se indicó, se llevaron a cabo con equipamiento de última
generación, debidamente homologado por las normas vigentes y el organismo de
contralor. Este equipamiento es calibrado y certificado cada dos años en
Alemania, de donde es originario.
“Como
empresa socialmente responsable, para Telefónica es muy importante poder
contribuir haciendo mediciones públicas, no sólo con equipos de la compañía
debidamente certificados, sino también con equipos y con personal de ENACOM,
que es nuestro órgano de contralor, con lo cual corroboramos que las mediciones
que hacemos son precisas y que llevan tranquilidad a la población”, puntualizó
Galano.