El anunciado "Debate sobre la despenalización del aborto" prometido solo fue una bajada de línea de parte de la militante abortista Pamela Martín García (asesora parlamentaria) acompañada en esa postura por una intratable Carmen Storani, otrora figura representativa radical de la zona norte devenida en expositora vehemente, también estuvo presente la Dra. Graciela Moya, tal vez la más clara e imparcial expositora, ya que lo suyo se limitaba a la mirada desde el punto de vista médico.
La "moderadora" del malogrado debate fue parcial en todo momento, dejando que la Dra. Moya sea agredida con gestos y palabras proferidas a los gritos por parte del público presente que no aceptaba otra mirada que no sea la favorable a la despenalización del aborto.
La palabra era "cedida" y sacada cuando las preguntas o exposiciones del público eran contrarias a las de las nombradas Storani y Martin García, párrafo aparte para esta última, quien ante la exposición de un ciudadano contraria al aborto no tuvo mejor idea que bostezar sin disimulo, ponerse a guardar las cosas, y apurar su salida sin responder.
Me extraña mucho, que la convocatoria decía "Debate" algo a lo que los radicales estamos acostumbrados, y nos encontramos conque no solo no se permitió el debate, sino que nos tuvimos que conformar con la bajada de línea de dos panelistas que no supieron estar a la altura de las circunstancias. Raro también que en una casa radical se permita el desplante y el destrato hacia una profesional como la Dra. Moya por el solo hecho de estar en desacuerdo con la postura abortista.
Nos retiramos con un sabor raro, lo que tanto le criticabamos al kirchnerismo, la bajada de línea, el desprecio a la opinión contraria y el pensamiento único coparon la casa radical de Vicente López por una noche, esperemos que solo haya sido un hecho aislado.
Todo lo expuesto anteriormente lo podrán corroborar si miran el siguiente video:
Román Reynoso
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