Hoy se cumplen 37 años de la entrega del informe de La CONADEP al Presidente Raúl Alfonsín. - MUNDO NORTE

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20/09/21

Hoy se cumplen 37 años de la entrega del informe de La CONADEP al Presidente Raúl Alfonsín.

Hace 37 años, el 20 de septiembre de 1984 cuando el presidente Raúl Alfonsín recibía de Ernesto Sábato en la Casa de Gobierno, el informe final de la CONADEP sobre la desaparición de personas. El informe, titulado Nunca Más, representaba según Alfonsín un “aporte fundamental para que, de aquí en adelante, los argentinos sepamos cabalmente, por lo menos, cuál es el camino que jamás deberemos transitar en el futuro. Para que nunca más el odio, para que nunca más la violencia perturbe, conmueva y degrade a la sociedad argentina”

En aquellos tiempos de la vuelta a la democracia y a solo cinco días de aquel histórico sábado 10 de diciembre, en el que Alfonsín hablaba desde el balcón del Cabildo a una multitud incalculable que vivaba la democracia y no podía creer que volvieran la libertad a la Argentina y los militares a los cuarteles. Que simbolizaba la vuelta a la Democracia en la República Argentina.

 Ese jueves 15 de diciembre, hace 37 años atrás el presidente firmó el decreto 187, un paso realmente tan audaz como ejemplar. Creaba la Comisión Nacional de Desaparición de Personas (Conadep) a través de un texto muy breve en el que designaba a 16 personas de trayectoria intachable para que, en un lapso de 180 días, recibieran denuncias sobre secuestros y centros clandestinos de detención.

Esa Comisión creada por el Decreto 187/83, y tenía las siguientes funciones:

  1. Recibir denuncias y pruebas sobre aquellos hechos y remitirlas inmediatamente a la justicia si ellas están relacionadas con la presunta comisión de delitos.
  2. Averiguar el destino o paradero de las personas desaparecidas, como así también toda otra circunstancia relacionada con su localización.
  3. Determinar la ubicación de niños sustraídos a la tutela de sus padres o guardadores a raíz de acciones emprendidas con el motivo alegado de reprimir al terrorismo, y dar intervención en su caso a los organismos y tribunales de protección de menores.
  4. Denunciar a la justicia cualquier intento de ocultamiento, sustracción o destrucción de elementos probatorios relacionados con los hechos que se pretende esclarecer.
  5. Emitir un informe final, con una explicación detallada de los hechos investigados, al ciento ochenta (180) días a partir de su constitución.

La comisión se conformó por personas de reconocido prestigio en su labor profesional.

Las personas seleccionadas fueron

  • Ernesto Sábato, un reconocido escritor y físico progresista. Fue elegido presidente de la comisión por el resto de sus miembros.
  • Ricardo Colombres, abogado y ex rector de la Universidad de Buenos Aires.
  • René Favaloro, respetado médico y creador del by pass coronario. Renunció en desacuerdo a que la comisión no estuviese facultada a investigar los crímenes de la Triple A.
  • Hilario Fernández Long, maestro e ingeniero. Decano de la Facultad de Ingeniería y llegó a ser rector de la UBA.
  • Carlos T. Gattinoni, pastor evangélico de la Iglesia Metodista Argentina, fuertemente involucrado en movimientos de derechos humanos.
  • Gregorio Klimovsky, matemático y filósofo, considerado uno de los mayores especialistas en epistemología.
  • Marshall T. Meyer, rabino estadounidense, ciudadano argentino y fundador del Seminario Rabínico Latinoamericano, activo militante de los derechos humanos y fundador del Movimiento Judío por los Derechos Humanos.
  • Jaime de Nevares, monseñor y activo defensor de los derechos humanos y del estado de derecho.
  • Eduardo Rabossi, filósofo y activo militante de los derechos humanos.
  • Magdalena Ruiz Guiñazú, periodista radial.

A ellos se sumaron tres representantes de la Cámara de Diputados, Santiago Marcelino LópezHugo Diógenes Piucill y Horacio Hugo Huarte, los tres radicales, puesto que el Partido Justicialista había elegido no participar de la CONADEP. En la misma línea, el Senado Nacional con mayoría peronista, no eligió sus representantes. Fue llamativa la No integración del justicialismo dicha comisión.

Luego 280 días de trabajo, la CONADEP redactó un Informe Final, que más tarde fue publicado la Editorial Universitaria EUDEBA, en el que reseñó una síntesis de su tarea. Al leer su Prólogo basta para tomar dimensión de la gran y titánica tarea desarrollada por la comisión, y que tan importante labor sólo pudo ser llevada adelante por la decisión de sus integrantes y el contundente apoyo político del Presidente Raúl Alfonsín.

Este informe final de la comisión  recopiló las denuncias sobre violaciones a los derechos humanos y fue entregado el 20 de septiembre de 1984 al entonces presidente Raúl Alfonsín.
La Comisión funcionó entre diciembre de 1983 y septiembre de 1984 y fue clave para el desarrollo del Juicio a las Juntas Militares que condujeron la última dictadura argentina (1976-1983).

En dicho Prólogo, que años más tarde durante la gestión peronista encabezada por Kirchner pretendió reescribir queriendo reformular la historia, los miembros de la CONADEP afirmaban, contraponiéndose a quienes afirmaban que esta no era más que una estrategia de Alfonsín para garantizar la impunidad de los delincuentes tras un Informe Final y pese a que el propio Presidente había sometido a Juicio sumarísimo a los responsables de la represión, que ‘Nuestra Comisión no fue instituida para juzgar, pues para eso están los jueces constitucionales, sino para indagar la suerte de los desaparecidos en el curso de estos años aciagos de la vida nacional. Pero, después un gran trabajo y de haber recibido varios miles de declaraciones y testimonios, de haber verificado o determinado la existencia de cientos de lugares clandestinos de detención y de acumular más de cincuenta mil páginas documentales, tenemos la certidumbre de que la dictadura militar produjo la más grande tragedia de nuestra historia, y la más salvaje. Y, si bien debemos esperar de la justicia la palabra definitiva, no podemos callar ante lo que hemos oído, leído y registrado; todo lo cual va mucho más allá de lo que pueda considerarse como delictivo para alcanzar la tenebrosa categoría de los crímenes de lesa humanidad. Con la técnica de la desaparición y sus consecuencias, todos los principios éticos que las grandes religiones y las más elevadas filosofías erigieron a lo largo de milenios de sufrimientos y calamidades fueron pisoteados y bárbaramente desconocidos.’

La mayor parte de la tarea desarrollada por la CONADEP y su Informe Final fueron utilizados por el Fiscal Julio César Strassera en su acusación durante el Juicio a las Juntas Militares.

El Presidente Alfonsín reconoció el trabajo de la Comisión y se refirió a ellos diciendo que, “el país necesitaba en consecuencia este ejemplo de Uds. así como necesita saber la verdad acerca de lo que pasó. Porque sobre la base de la mentira o de la oscuridad no podemos construir la unión nacional, y solamente sobre la base de la verdad y de la justicia es que podemos encontrarnos en la reconciliación, tomados por qué no, de la mano de la bondad. Yo creo que lo que Uds. han hecho ya ha entrado en la historia de nuestro país, constituye un aporte fundamental para que de aquí en adelante los argentinos sepamos cabalmente, por lo menos, cual es el camino que jamás deberemos transitar en el futuro, para que nunca más el odio, para que nunca más la violencia perturbe, conmueva y degrade a la sociedad argentina».

La entrega del trabajo de la Comisión, un ejemplo al mundo, una vuelta de página en la Argentina y fue un hecho de trascendencia internacional y hoy 37 años atrás podemos decir que fue el primer paso y piedra fundamental para que el NUNCA MÁS sea para siempre.

 

 

Lic. Javier Argolo

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