LA MATANZA: ESPINOZA NO TIENE PAZ - MUNDO NORTE

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16/01/15

LA MATANZA: ESPINOZA NO TIENE PAZ

El intendente de La Matanza debió recibir en la misma semana dos malas noticias: La renuncia de dos funcionarios. Uno de ellos, Manuel Fresco, se fue al massismo. Pero el restante,Herminio Bayón, es el que más preocupa al armado de Espinoza que sólo tiene en mente ser el sucesor de Daniel Scioli. La jugada que podría quebrar al PJ de La Matanza si pone a dedo a Verónica Magario como la sucesora a la intendencia.
El intendente de Fernando Espinoza cerca de la tormenta en La Matanza
Herminio Bayón fue hasta hace poco el Secretario de Obras y Servicios Públicos de La Matanza. Estuvo en ese cargo durante 11 años, desde antes de la llegada del propio intendente al poder. Es cercano del dirigente Luis D’Elia y en la década del ’90 enfrentando a las políticas neoliberales de la época que cubrían también a buena parte del peronismo, generaron un espacio político y social en La Matanza apoyado en el poder territorial. Fue la Corriente Pan, Trabajo y Justicia.
Desde ese lugar Bayón se acercó al Frente Grande y con el poder de fuste a base de territorio desafió a aquellas autoridades del espacio: Chacho Álvarez, la propia matancera Mary Sánchez a quien le ganó dos veces: en las internas del espacio. Y en la justicia cuando Sánchez quiso impedir la presentación de la boleta de Bayón.
El pasado de Bayón como concejal también incluye su pelea con Alberto Pierri; el ex diputado nacional menemista e intendente “extraoficial” de La Matanza cuando la cara visible era el contador de sus empresas, Héctor Cozzi; desde el año 1991 al 1999. El ahora ex funcionario, lo denunció penalmente a Cozzi 9 veces.
Era tal el poder de fuego que había conseguido Bayón que Luis D’Elia años más tarde le seguía reconociendo su “compromiso militante”.
En 1999 Bayón le ganó la interna del Frente Grande bonaerense a Mary Sánchez en La Matanza. Aquella victoria se recuerda hasta el día de hoy, ya que en esas elecciones Bayón dijo que le daría el lugar a Lidia Elsa Satragno, más conocida como Pinky. El objetivo era destronar al PJ que presentaba a un joven Alberto Balestrini como candidato a intendente. En el boca de urna, Pinky le ganaba a Balestrini. La locutora hasta salió a decir que había vencido al peronismo, pero el recuento final le dio la intendencia a Balestrini.
Fue al iniciar su segundo mandato como intendente, en el año 2003, cuando Balestrini sumó a Bayón. Es que se venían nuevos aires en la política de la mano de Néstor Kirchner y algunos habían decidido empezar a despegarse del duhaldismo y el viejo PJ para ampliar las fronteras en lo que luego sería la consolidación del Frente para la Victoria. Y bajo ese contexto Bayón ingresó al gabinete matancero.
Desde el 2003, Herminio Bayón ocupaba el cargo de Secretario de Obras y Servicios Públicos. Además Balestrini mantenía buen diálogo con Luis D’Elia, otro dirigente cercano al ahora ex funcionario.
La era Espinoza y su afán de gobierno
Ya más cercano en el tiempo, Bayón condujo su área durante los dos mandatos de Balestrini, el interinato de Fernado Espinoza (2005-2007), y desde el 2007 a la actualidad. Hasta que pegó el portazo.
Fue con las aspiraciones reales a gobernador de Fernando Espinoza que la relación entre el funcionario y el intendente se fueron desgastando. De hecho el “desgaste” es el principal motivo que se esgrime desde el propio municipio a la hora de hablar de la salida del Secretario de Obras Públicas.
La determinación de Espinoza de ser el sucesor de Scioli abrió un abanico de posiciones al seno del peronismo k en La Matanza. Por un lado el anhelo del intendente es que quien continúe al frente del Ejecutivo matancero sea la diputada nacional Verónica Magario. Pero no es el único nombre en danza.
Su par, Carlos Gdansky también quiere ser intendente y por ello renunció al PJ local. Dirigente sindical de la UOM, cuenta con el respaldo del titular de la CGT oficialista, Antonio Calo. Y no duda en afirmar que el sindicalismo de La Matanza se merece un intendente.
Y Bayón tampoco se quedó quieto. Junto al presidente del concejo deliberante, Miguel Bampini y el Jefe de Gabinete de La Matanza, Luis Lata, armó a mitad del año pasado el Frente de Agrupaciones Peronistas. Un espacio que propone lealtad absoluta a Cristina Kirchner. Un espacio que incomoda a Espinoza y puertas adentro le reprocha su acercamiento tan constante con Daniel Scioli.
Algo que también –aunque bajo otro contexto y en pos de la disputa interna de los precandidatos a gobernadores del FpV- había hecho visible, el intendente de Berazategui, Juan Patricio Mussi, luego de que Espinoza cerrará el plenario del PJ en La Plata. “No se nombró mucho ni a Néstor ni a Cristina y eso no me gustó” decía el jefe comunal minutos después de bajar del escenario en el que no tuvo uso de la palabra.
Espinoza en tanto sigue al lado de Scioli recorriendo la Costa bonaerense. Visita las playas naranjas y mientras en el distrito clave para las elecciones de este año puertas adentro algunas posiciones penden de un hilo, el oficialismo matancero manda al senador Daniel Barrera a decir que todo está bien y que la salida de Bayón es parte de la oxigenación propia del gabinete.

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