En Democracia No hay nada más valioso y esencial que el derecho a poder preguntar y solicitar Información.
El 2021 es el sexto año que la UNESCO
celebra el 28 de septiembre como el "Día Internacional del Derecho de
Acceso Universal a la Información," después de que la UNESCO
aprobara la resolución 38/ 70 del 17 de noviembre del 2015.
El
Día Internacional del Derecho de Acceso Universal a la Información tiene especial
relevancia para la nueva Agenda 2030 del Desarrollo Sostenible y, en
particular, para Objetivo del desarrollo sostenible que exige garantizar
el acceso público a la información y la protección de las libertades
fundamentales.
Reconstruir mejor
con el acceso a la información". Destaca el papel de las leyes de acceso a
la información y su aplicación para volver a crear instituciones sólidas para
el bien público y el desarrollo sostenible. Sirven también para reforzar el
derecho a la información y la cooperación internacional en el ámbito de la
aplicación de este derecho humano fundamental. Además, los debates mundiales
sobre «reconstruir mejor» se mantienen adaptados al contexto de la pandemia de
la COVID- 19.
Tal es la Importancia del acceso a la
Información que se encuentra reconocido en la Convención de Naciones Unidas Contra
la Corrupción, Convención
Interamericana Contra La Corrupción. El derecho
de acceso a la información se define como el derecho de toda persona
de buscar y recibir información en poder del gobierno, de las instituciones
públicas y de las instituciones particulares que reciban fondos del Estado para
su subsistencia y operatividad. Dicho derecho se reconoce como fundamental para
el desarrollo pleno de una sociedad democrática y resulta instrumental porque a
través de él se acceden a otros derechos.
El
Acceso a la Información Pública (AIP) es clave para un debido y comprometido
control social sobre las acciones de gobierno y sus resultados, genera mayores
niveles de participación comunitaria en los asuntos que competen a todos y son
de tamaña importancia para la lucha contra la corrupción y el mal desempeño de
agentes públicos como así de resultados negativos de acciones y políticas
llevadas a cabo por los responsables de áreas estatales, instituciones públicas
y privadas cuyo sostenimiento se basa en dineros públicos.
La
Argentina ha transitado, en esta materia, un camino sinuoso ya que hasta hace
muy poco y analizados nacionalmente estábamos muy mal posicionados en el
ranking de naciones con respecto a la temática del AIP, salvo algunas honrosas
excepciones distritales (provincias y municipios).
En el Gobierno anterior (Cambiemos) el
panorama cambió sustancialmente con la
sanción de la Ley Nacional 27.275 del año 2016 que regula el derecho de
acceso a la información pública y que en su parte preliminar establece un
objeto claro “garantizar el efectivo ejercicio del derecho de acceso a la
información pública, promover la participación ciudadana y la transparencia de
la gestión pública”, y se funda en una serie de principios que a continuación
se detallan: presunción de publicidad, transparencia y máxima divulgación,
informalismo, máximo acceso, apertura, disociación, no discriminación, máxima
premura, gratuidad, control, responsabilidad, alcance limitado de las
excepciones (causales por los cuales se deniega la entrega de información), in
dubio pro petitor (interpretación en caso de duda a favor de la vigencia del
derecho a la información), facilitación y buena fe. Cabe destacar que la ley en
cuestión toma los preceptos internacionales en la materia referenciados por la
ONU (Organización de Nacionales Unidas) y posee estándares altamente óptimos.
El objetivo
principal del Día Internacional del Acceso Universal a la Información de 2021
es acelerar las soluciones sostenibles encaminadas a alcanzar los Objetivos de
Desarrollo Sostenible. Esto se hará mediante la movilización de los gobiernos,
la sociedad civil y las personas para que asuman como propio y contribuyan al
Objetivo de Desarrollo Sostenible 16 (Promover sociedades justas,
pacíficas e inclusivas) en particular en lo relativo a la creación de
instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles.
Los ciudadanos
informados pueden tomar decisiones informadas, por ejemplo, cuando van a las
urnas. Solo cuando los ciudadanos sepan cómo son gobernados, podrán hacer que
sus gobiernos rindan cuentas por sus decisiones y acciones. La información es
poder. Por tanto, el acceso universal a la misma es una piedra angular de sociedades
del conocimiento saludables e inclusivas.
Finalmente,
es importante hacer docencia, explicando y trasmitiendo que este conjunto
temático como elementos troncales para construir y solidificar una democracia
transparente, moderna, inclusiva y que dé respuestas efectivas a los
ciudadanos.
Una
ciudadanía activa es el motor y fortalecimiento de la Democracia y el pueblo
tiene el derecho a saber lo que hacen sus funcionarios.
El
Desarrollo del Acceso a la Información puede significar un cambio fundamental
en el fortalecer la Transparencia.
Lic.
Javier Marcos Argolo