Esta mañana se presentó
Manejá lo que Tomás, un ciclo de charlas gratuitas que se realizarán en
colegios del Municipio para educar sobre los riesgos y consecuencias de la
ingesta excesiva de bebidas alcohólicas.
Hirsch (a la izquierda) presidió el encuentro
Con el objetivo de informar
a los jóvenes sobre los riesgos y consecuencias de la ingesta excesiva de
alcohol, el Municipio de San Isidro presentó hoy el programa Manejá lo que
Tomás, un ciclo de charlas para concientizar a los adolescentes sobre el
consumo responsable.
El taller, que se anunció
esta mañana en el Teatro del Viejo Concejo, surgió por el trabajo en conjunto
entre el Municipio, la Federación de la Industria Licorista Argentina, y la
asociación civil Las Otras Voces.
Durante el lanzamiento, el
secretario de Niñez, Adolescencia y Familia de San Isidro, Gustavo Hirsch,
explicó que la misión es mejorar la calidad de vida de los chicos para que sean
adultos sanos.
“Trabajaremos en conjunto
sobre el abuso de alcohol para ayudar a los chicos con talleres de
sensibilización en la materia de Construcción Ciudadana que dictan colegios
secundarios. El taller funcionará en escuelas provinciales y municipales. Cada
año visitará diferentes establecimientos educativos”, contó el funcionario.
Bressan, Klentak, Padilla y Bacher
El presidente del Concejo Deliberante, Carlos Castellano, agregó que hay que lograr que la facilidad que hay para tomar alcohol sea en forma responsable. “Para evitar situaciones de riesgo”, aseguró.
En cuanto al objetivo, el presidente de la Federación Licorista, Guillermo Padilla, coincidió que se apunta a trabajar en la educación y prevención del consumo excesivo y abusivo de bebidas alcohólicas. “Esta iniciativa genera una dinámica de acercamiento entre docentes, padres y jóvenes respecto de la toma de conciencia de este tema”.
Por otro lado, la directora de Las Otras Voces, Silvia Bacher comentó que el proyecto pone sobre la mesa un problema que preocupa a todos. “La idea es que los chicos reflexionen sobre sus decisiones en su tiempo libre e identifiquen situaciones de riesgo”.
La experiencia ya se implementó con éxito en otros municipios diferentes en su conformación social. “El impacto es positivo porque docentes y directores comprenden que es posible recuperar las voces de los chicos y trabajar junto a ellos en solucionar esta problemática”, concluyó Bacher.