El Municipio de
Tigre recomienda tomar precauciones contra las altas temperaturas esperadas
para esta época.
Según información del
Servicio Meteorológico Nacional (SMN), para los meses de Enero y Febrero se
pronostican térmicas alrededor de los 35°C para la zona de Tigre y el resto del
GBA Norte. Por ese motivo, el Municipio comunica una serie de consejos
otorgados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para prevenir,
minimizar y reaccionar ante los posibles riesgos vinculados con las olas de
calor excesivo.
Al respecto, Inés Pertino, subsecretaria de Política
Sanitaria, destacó: "Es importante que los vecinos de Tigre tomen
precauciones a la hora de salir a la calle, así evitan descompensaciones
producidas por un golpe de calor. Si sufren algún síntoma grave producto de las
altas temperaturas pueden llamar al Sistema de Emergencias Tigre al
4512-9999/8/7, pero lo importante es concientizar a los adultos mayores y a las
familias con bebés más chiquitos sobre la importancia de tomar estas
precauciones".
La mayoría de los
trastornos causados ocurren debido a que la víctima ha estado expuesta a una
temperatura excesiva o ha hecho demasiado ejercicio para su edad o condición
física. Los ancianos, niños pequeños, enfermos y personas obesas tienen mayores
probabilidades de sucumbir al calor extremo.
En consecuencia, las
personas que residen en zonas urbanas corren un mayor riesgo de sufrir efectos
negativos, ya que el asfalto y el concreto retienen el calor por más tiempo y
lo liberan paulatinamente por la noche, produciendo temperaturas nocturnas más
altas.
Las personas
mayores deben tener especialmente cuidado, debido a que el calor les
puede provocar cansancio, confusión e incluso ataques al corazón, como también
empeorar las condiciones existentes de enfermedades cardiovasculares y
respiratorias.
Frente a las olas de
calor extremo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda lo
siguientes cuidados:
Para bebés,
chicos, mayores de 65 años y personas que padecen enfermedades crónicas:
• Tomar mucha agua
durante todo el día.
• Evitar las comidas
abundantes. Consumir alimentos frescos, como frutas y verduras, lavados
previamente con agua limpia.
• Evitar el consumo
de bebidas alcohólicas, dulces o infusiones calientes.
• Usar ropa suelta.
• No realizar
ejercicio físico en ambientes calurosos. Tomar líquido antes, durante y después
de practicar cualquier actividad al aire libre.
• Protegerse de los
rayos ultravioletas con protectores solares.
Especialmente,
para lactantes y niños muy pequeños:
• Darles el pecho a
los lactantes con más frecuencia.
• Hacerlos beber agua
fresca y segura.
• Trasladarlos a
lugares frescos y ventilados.
• Ducharlos o mojarles
el cuerpo con agua fresca.