Durante el último mes, el Municipio enseñó medidas de prevención y
métodos de rescate a chicos, jóvenes y adultos que usan las 5 piletas
climatizadas de sus establecimientos. De esta manera y como parte de una
campaña de la asociación NADI, los vecinos aprendieron a reducir riesgos en
natatorios y playas.
El verano está
cada vez más cerca y para muchos eso significa el reencuentro con el mar, el
río o las piletas, por eso el Municipio de San Fernando dedicó cuatro semanas
para instruir en normas de seguridad, métodos de prevención y rescate en casos
de emergencia a grandes y chicos desde los 4 años que aprenden a nadar en los 5
natatorios climatizados de sus Polideportivos.
La
Subsecretaría de Educación, Deportes y Contención Social se sumó con este
proyecto a la campaña nacional de la asociación NADI (Natación Aplicada al
Desarrollo Infantil), aunque extendió las capacitaciones a jóvenes y adultos y
les agregó un curso básico de RCP -reanimación cardiopulmonar-. Para que estas
clases sucedieran, fue necesario contar con la infraestructura adecuada y el
numeroso plantel de profesores y guardavidas que se desempeñan en los
establecimientos de la Comuna.
Pablo Rubio,
Coordinador de estas jornadas, explicó en qué consisten: “En concientizar sobre
los riesgos del agua, dar nociones sobre seguridad y recomendaciones a los padres.
Trabajamos mucho en las piletas pero también con folletería, carteles y en
Internet a través de las redes sociales”.
“Los chicos
participan muy contentos, porque lo hacemos jugando sin impartirles cómo tienen
que actuar”, dijo el funcionario. Aprovechó luego para difundir algunos
conceptos de prevención: “Lo fundamental para los chicos es que no estén solos
en la pileta, no tienen que quedar sin control visual; la idea es compartir
momentos agradables y no exponerse a tragedias. En cuanto a la navegación, está
prohibido circular en el río sin chalecos salvavidas; y en cuanto al mar, es
muy importante respetar el código de banderas”.
Sobre la
señalización con banderas, Pablo Melgar, uno de los guardavidas del
Polideportivo N° 3, brindó algunos detalles: “A raíz de acontecimientos que
sucedieron en la costa atlántica el año pasado, se implementó una bandera nueva
para indicar peligro por tormenta eléctrica, que es negra con el dibujo de un
rayo en blanco. Nosotros empezamos a usarla también, y si un vecino la
encuentra en la puerta del Polideportivo, será porque la pileta está cerrada
hasta que cambie el clima”.
A su vez, la Coordinadora
de Natación de ese ‘Poli’, Ana Clara Bustos, comentó en medio de una de las
clases: “Hubo mucho interés, porque hasta los que ya sabían algún concepto también
resolvieron dudas y participaron. A los profesores nos ayuda mucho en nuestro
trabajo, porque ahora ellos mismos saben cómo cuidarse”.
El pequeño
Vicente enumeró actividades que realizó con su grupo de chicos de entre 4 y 6
años: “Nadamos en torpedos, usamos salvavidas, hicimos juegos y aprendimos las
banderas. Simulamos que se estaba hundiendo un barco, unos pedían auxilio y
otros los tenían que ir a rescatar. Fue muy entretenido”.
Su compañera Ada
destacó: “Estuvimos haciendo muchos juegos y aprendimos rápido. Me voy a saber
las banderas para ir a la playa en el verano”. En ese sentido, Laureano opinó:
“Aprendimos a rescatar gente, eso para mí es muy bueno”.